miércoles, 30 de marzo de 2016

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Biografía autora del libro Secretos entre sombras





Soy una chica de 4º de la E.S.O y mi nombre empieza por A.
Voy a la clase de Literatura Universal y me gusta leer y si te has leído mi relato...
¡Espero que te haya gustado!




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Secretos entre sombras: Capitulo 1

Capítulo 1

Pacto en la madrugada

    Me bebo la última gota de mi café, y siento como va calentando mi garganta. Ya estoy listo para salir, como cada noche, a pasear por el paseo marítimo de la costa de Barcelona. Me gusta ir por noche porque creo que es cuando más libre me siento, también es el momento del día en el que reflexiono sobre las decisiones que he tomado en mi vida y sobre cómo afrontar los problemas. Si miro por la ventana todo ya está muy oscuro, son algo más de las once y hace frío fuera pero necesito este paseo como el café de todas las mañanas.                                                                                        
Ahora te explicare como llegar a esta hermosa playa, mi casa esta a las afueras y para poder llegar a ese paseo marítimo, yo tengo que pasar por debajo de los puentes de las carreteras principales. Normalmente voy en bicicleta porque hay una carretera para llegar a la playa más rápido lo bueno es que por lo general nunca pasan coches ya que está muy oscuro y poco asfaltado.                                                                                  
Ya me he puesto el casco y voy bajando por la avenida, siempre miro dos veces por si acaso hay algún coche en esa carretera, aunque sé de sobra que no habrá ninguno. Enciendo mi linterna y veo una sombra que me aterroriza tanto que hace que se me caiga la linterna. Paro la bicicleta y me bajo de ella para coger la linterna, cosa de la que me arrepiento casi al instante ya que vuelvo a ver la sombra, y veo la silueta de lo que parece ser un hombre robusto con un saco enorme al hombro, de repente tira la bolsa que llevaba al hombro y se lleva mi bicicleta.                                                                     
Me lanza una mirada, que no es terrorífica como me esperaba, más bien es como si intentara transmitir confianza o como si quisiera que me encargara de algo.  De repente siento como un escalofrío me recorre todo el cuerpo, ya que es entonces cuando comprendo que quiere que me encargue del cadáver.